ALMA amadísima, estoy tan pendiente de ti y de tu felicidad, cada día te invito a ser feliz, con lo que tienes, que me incluyas en tus planes; tú sabes que te amo con predilección especialísima, si te das cuenta de TODO lo que te he dado, tu felicidad, alma mía, sabes que está dentro de ti en tu corazón, quiero que arrojes muy lejos de ti todo rencor, rebeldía o remordimiento, quiero que sepas que quiero inundarte de mi bondad y de mi amor, porque sólo YO puedo llenarte siempre, en todo momento, si te dejas alcanzar en ese correr apresurado, YO puedo ayudarte a fabricar felicidad cada día; no quiero que te estés quejando, sino que hagas una lista de tus bendiciones y que dejes de añorar "eso" que sabes que no es para ti, tú tienes tantas cosas lindas, salud, alegría de vivir, tienes familia que te permite DAR y recibir AMOR, con los que debes de contar siempre y estar dispuesta a entregarte en todo momento, porque la felicidad está en que vivas muy cerca de MI, en todos los momentos, en los de luchas y de angustia y tristeza, porque si vives conmigo, podrás estar alegre aun en medio de todos estos estados de tu alma; si te detuviras un poco, captarías con los ojos del alma los paisajes que pinto para ti en forma especial, pero vas tan de prisa que no captas la belleza escondida en las personas, circunstancias, y en las cosas; si percibieras MI amor con tantas almas que te rodean, en las que te aman, si te dejaras amar, si fueras sencilla, trata de ser humilde y sencilla, alma amadísima para que penetre en ti MI amor y te inunde de esa PAZ que tanto buscas, muchas veces por caminos tan errados.
Ven, alma mía, quiero que vivas para MI, que hagas un alto en tu camino y que veas TODO lo que tienes, y me hagas una lista de lo que quieres, todo puedo dártelo y te lo doy si en ello puedes ser más espiritual. Si, sé que tienes que luchar, pero ¿no me tienes a MI? Ven, toma mi mano.
Cristo y yo
Anamaría Rabatté Cervi
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